T-GT II SERVO BASE

T-AEC-Q: Durabilidad

Para garantizar los máximos niveles de durabilidad y calidad a lo largo del tiempo, el T-GT II presenta un diseño electrónico completamente nuevo con placas de circuito impreso certificadas AEC-Q, de la industria automotriz del mundo real.

El objetivo detrás de esta reelaboración de los componentes internos utilizados en el Thrustmaster T-GT II es satisfacer las necesidades de los pilotos expertos más competitivos del mundo que utilizan su equipo de simulación de carreras como herramienta de trabajo real, a lo largo de sesiones de entrenamiento extremadamente largas y competiciones increíblemente intensas.

T-DCC: Precisión

La gestión de la deriva es imprescindible para todos los conductores que necesitan controlar cuidadosamente el derrape de su vehículo en las curvas.

Con esto en mente, el T-GT II emplea una tecnología que permite el cálculo de la curva de deriva en tiempo real (T-DCC), manteniendo así la capacidad de respuesta tanto del volante como del automóvil en el juego en todas las circunstancias. Esta función T-DCC incorporada permite a los conductores centrar su atención en realizar movimientos muy precisos, para poder estar siempre uno o dos pasos por delante en términos de conducción.

T-RTF: Sensibilidad

El sistema Real Time Force feedback (T-RTF) reduce los tiempos de cálculo de Force Feedback, lo que permite una respuesta instantánea.

Los efectos de Force Feedback son gestionados por un procesador integrado en tiempo real. Esto significa que estos efectos no dependen del juego en sí para evitar contratiempos con respecto a la capacidad de respuesta, y la mejor parte es que esto es válido para todos los juegos, tanto en consolas como en PC. De esta manera, la tecnología T-RTF patentada por Thrustmaster permite a los usuarios disfrutar del juego sin zonas muertas ni latencia.

T-LIN: Linealidad

El volante de carreras Thrustmaster T-GT II asegura efectos Force Feedback perfectamente lineales: la fuerza que siente el usuario es 100% proporcional a la fuerza determinada en el juego. El comportamiento de los coches y las condiciones del circuito se reproducen fielmente, con un nivel de detalle impresionante.

Esto permite a los corredores anticiparse y reaccionar de manera más eficiente a las condiciones del circuito, gracias a la información transmitida a través del volante de carreras. También mejora la comprensión de los usuarios sobre su conducción, ayudándoles a batir récords y ganar carreras.

T-40VE: Velocidad

El motor de 40 vatios del volante de carreras T-GT II destaca por su Force Feedback perfectamente lineal y su increíble velocidad (par dinámico), para realizar desde largas curvas de bloqueo hasta curvas en S súper fluidas.

Este motor de alta potencia proporciona la velocidad necesaria para generar efectos notablemente dinámicos y potentes.

Gracias a su velocidad, el motor también transmite respuestas más rápidas y robustas a los pilotos en tiempo real, mejoradas por la tecnología T-LIN patentada por Thrustmaster.

T-DFB: Profundidad

Años de colaboración con Polyphony Digital han dado como resultado la creación de sensaciones profundas en la columna de dirección.

La combinación del Force Feedback refinado de los motores brushless con esta tecnología Depth Feedback crea una percepción realista del entorno en 3D. Como complemento al Force Feedback estándar, este sistema mejora la experiencia de conducción con una nueva gama de efectos que incluyen adherencia de los neumáticos (agarre o deslizamiento) en subviraje y sobreviraje, transferencias de masa, texturas e irregularidades de la carretera, suspensión y otros parámetros específicos de cada vehículo y circuito.

T-Turbo: Potencia

Esta potente fuente de alimentación externa ofrece una alimentación constante y una potencia máxima enorme (400 vatios) para responder instantáneamente a las peticiones ultra rápidas de los juegos interpretadas por la función T-LIN y el motor T-40VE durante las fases del juego, como derrapes fuertes o chicanes múltiples.

La forma toroidal de la fuente de alimentación optimiza la eficiencia frente al calentamiento en un 86%, con un diseño sin aletas.

T-M.C.E.: Estabilidad

El sistema Motor-Cooling-Embedded mantiene la linealidad y la dinámica con el potente motor T-40VE.

Gracias a la tecnología T-M.C.E., el motor T-40VE gestiona la transferencia y disipación de calor de manera más eficiente que nunca. El T-40VE incorpora este sistema de refrigeración justo en su núcleo, en un entorno cerrado y muy restringido. Esta combinación garantiza una precisión constante en cuanto a los efectos y el rendimiento del T-GT II incluso en las sesiones de competición más largas, de manera que los pilotos pueden experimentar toda la complejidad de las sensaciones.

T-F.O.C.: Control

Algoritmo T-F.O.C. con sensores de efecto Hall: La tecnología patentada de Thrustmaster identifica la posición del volante de carreras con una precisión milimétrica y ofrece una exactitud inigualable.

Gracias a su precisión y al uso de un algoritmo F.O.C. optimizado, el motor responde de forma dinámica y rápida a las solicitudes de mayor par, al tiempo que reduce las disminuciones de potencia.